#VicheConINVIMAenlaCOP16
Estimada vicepresidenta y ministra de Igualdad y Equidad, Francia Márquez Mina,
Se sigue incautando Viche. El Viche es Patrimonio Inmaterial Cultural de la Nación, se aprobó la Ley del Viche 2158 de 2021 y hace poco la Resolución 113 del INVIMA el 24 de enero de 2024, pero en la práctica no hay una semana que pase sin que a algún productor, productora o establecimiento las “autoridades” del Estado colombiano le incauten y decomisen viche.
El lenguaje, las justificativas y los mecanismos han cambiado a lo largo de las décadas y los últimos años, pero la estructura racista del Estado que mantiene el status quo que perjudica a los habitantes del Pacífico colombiano sigue intacta y se evidencia en el tratamiento que recibe el viche.
Quedan un poco más de dos años del Gobierno del Cambio y a pesar de los avances, se continua en el limbo.
Proponemos 3 Acciones urgentes para el Viche:
- Permitir que las marcas de viche que cumplan con los requisitos INVIMA puedan obtener el registro sanitario ya!
- Disponer de un regimen tributario especial para el Viche
- No permitir que los departamentos y sus licoreras restrinjan la producción, distribución y comercialización del Viche
Son tres acciones importantes que van a permitir que el viche se pueda consumir, sin restricciones kafkianas, en todo el territorio nacional y después internacional.
- PERMITIR QUE LAS MARCAS DE VICHE QUE CUMPLAN CON LOS REQUISITOS INVIMA PUEDAN OBTENER YA EL REGISTRO SANITARIO
Tardó más de dos años y mucho esfuerzo lograr que se firmara la Resolución 113 de enero de 2024 por medio de la cual se establecen los requisitos sanitarios para la producción y comercialización de Viche/Biche.
Como usted bien sabe, no fue un ejercicio sencillo. Además, tenía la difícil tarea de conjugar el “contexto cultural y social en que se lleva a cabo la producción” con “los requisitos sanitarios que deben cumplir las bebidas alcohólicas para consumo humano” y satisfacer las demandas de todas las partes interesadas. Pero se logró. Seguro que en el futuro se aprimorará el documento firmado, siempre hay espacio para mejora, pero se llegó a una resolución equilibrada que ayuda a que el viche avance.
La Resolución 113 del INVIMA del 24 de enero de 2024 pide1:
– Diligenciar el formato de solicitud que ya se encuentra en la página web de INVIMA.
– Tener una etiqueta que contenga todos los requisitos exigidos para bebidas alcohólicas.
– Que el titular fabricante esté acreditado por el Ministerio de Cultura o su delegado.
– Que el titular fabricante tenga certificado de existencia y representación legal o matrícula mercantil.
– Aportar análisis físico-químicos de un laboratorio autorizado cumpliendo con las exigencias sanitarias.
– Tener un certificado de la SIC que conste que la marca está registrada a nombre del interesado o que se encuentra en trámite.No son exigencias sencillas para la gran mayoría de productoras y productores, pero aún así deben existir entre 15 a 30 marcas de viche en la actualidad que cumplen con todos los requisitos.
El gran obstáculo actual al proceso es el punto 3: “El titular fabricante debe aportar el documento que lo acredite para la actividad Vichera emitida por el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes o su delegado.”
El Ministerio de Culturas ya tiene una lista de productoras y productores caracterizados de un trabajo serio hecho anteriormente y el ministerio podría emitir avales, pero por algún motivo no se hace. No se permite.
Esta lista puede y debe ampliarse por medio de un censo más completo, pero no descartar lo que ya existe. Además, muchas productoras y productores tienen cartas de los Consejos Comunitarios1 que certifican que son verdaderos productores y productoras tradicionales de viche en sus territorios, pero el Estado no acepta estas cartas. No cuentan.
SACAR EL INVIMA NO ES FÁCIL
Estos nuevos requisitos, aún amables con el contexto vichero, traerán un cambio de paradigma para la gran mayoría de productoras y productores. El gobierno debería lanzar un programa de apoyo masivo para que la gran mayoría de sacadoras y sacadores de viche que quieran comercializar sus productos fuera del territorio puedan hacerlo.
Hay mucho que el gobierno debe hacer:
1. Contratar gente en el Ministerio de Salud que se dedique exclusivamente a atender a los productores y productoras con el proceso sanitario.
2. Ofrecer pruebas de laboratorio gratuitas y asesoramiento en universidades o instituciones públicas para los análisis fisicoquímicos requeridos.
3. Tener personal formado y disponible en la SIC para ayudar con el registro de marca.
4. Fortalecer el equipo del Ministerio de Culturas que se dedica al viche para apoyar a las productoras y productores con la obtención de avales, certificados, etc.
5. Formar funcionarios públicos del gobierno nacional, departamental y municipal sobre el viche.
6. Poner la máquina del Estado a favor del viche de forma general.
No es hora de poner nuevas trabas e inventar nuevos requerimientos. Trabajemos con los que ya existen y permitamos que esta tradición comience su camino hacia la venta libre en el mercado. Ya el mercado traerá suficientes retos.
Mejor, mientras las productoras y los productores tramitan sus registros sanitarios, el gobierno debe dedicar sus energías al siguiente gran reto del viche ¡Los impuestos! - DISPONER DE UN REGIMEN TRIBUTARIO ESPECIAL PARA EL VICHE
Doña Nora Cenaida Morena Valoy creció en una finca metida hacia el monte en Sivirú, Bajo Baudó (Chocó); la única mujer de una familia humilde de 9 hijos aprendió a hacer viche desde muy joven para ayudar a su madre. Hoy la Maestra Nora del Viche Chaka Chaka es madre de tres hombres y dos mujeres y ha sacado a su familia adelante con el viche, la principal fuente económica para su hogar.
La Maestra Herminia de Viche Cuevita bautizó así su viche en homenaje al corregimiento donde nació y del que tuvo que desplazarse por causa de la violencia. Ahora vive cerca, en Virudó, Bajo Baudó (Chocó), destilando Viche y añorando su pueblo. En nuestras investigaciones en el Bajo Baudó, ríos Saija y Cajambre hemos encontrado que ¡Más de la mitad de las productoras de viche son oficialmente víctimas de la violencia!
La Maestra Susana Montaño Granja del Viche Del Solar es de San Bernardo de Saija, Timbiquí (Cauca) bella tierra de vocación vichera. En el corregimiento la economía gira alrededor de la coca, la minería o la caña. Ella vive de la caña. Su viche viaja en lancha por el río Saija por más de 4 horas por medio de un bello paisaje selvático lleno de carteles de disidencias hasta llegar a Puerto Saija donde le espera una nueva lancha que va por mar durante otras 4 horas hasta Buenaventura para su viaje a Cali.
Esas son las historias de cientos de productores y productoras de viche de territorios rurales donde el Estado brilla por su ausencia y donde para la mayoría el viche representa parte de un mínimo vital de subsistencia ¿Cómo tributar de forma justa el viche, una manifestación cultural de las comunidades negras de la ruralidad del Pacífico colombiano con su historia y realidad?
La Corte Constitucional reconoce que existen asimetrías históricas en relación a las comunidades afro y que son sujetos desiguales que se encuentran en circunstancias de vulnerabilidad y por lo tanto se debe aplicar un enfoque diferencial en relación al viche para comenzar a buscar una igualdad real y efectiva. Este enfoque podría manifestarse en un regimen tributario especial para el viche.
El impuesto a las bebidas alcohólicas en Colombia se compone de tres partes:
A. El Componente Específico: una tarifa por cada grado alcoholimétrico en una botella de 750ml. En el 2024 esa tarifa quedó en $350 pesos. Como el viche es fuerte y tiene en promedio un 40% de volumen de alcohol, ese impuesto sería de $14.000 pesos por botella de viche. Y se paga antes de vender el producto.
B. El Componente Ad Valórem: una tarifa del 25% sobre el precio de venta al público, antes de impuestos, certificado por el DANE. Es decir, el DANE sale por ahí y verifica los precios de los licores y de acuerdo con el precio promedio que encuentra, le aplica un 25% de impuesto a la bebida. Si encontrase que el viche se vende en promedio a $50.000 pesos en el mercado, este tendría que pagar $12.500 pesos de impuesto por botella. Si descubre que el precio promedio es de $100.000 pesos, entonces el impuesto sería de $25.000 por botella.
C. Impuesto de Valor Agregado (IVA) del 5%: empresas que se dediquen a la distribución de viche fuera de los territorios productores, deben pagar este impuesto de valor agregado.
El viche debe iniciar su camino de comercialización en las ciudades y después internacionalmente sin una carga tributaria pesada que sea una barrera para su desarrollo. Esto no significa que no deba pagar impuestos, pero poco a poco….
NUESTRA PROPUESTA ES:
– Que el viche pague solamente IVA del 5% durante los cinco años que el INVIMA va a permitir que productores y productoras de viche comercialicen por fuera de sus territorios sin registro sanitario.
– Que después de cinco años se aplique el Componente Ad Valórem al precio de venta de la galoneta/pimpina (25 litros) producida en territorio y no de venta al público.
– Que nunca se aplique el Componente Específico. - NO PERMITIR QUE LOS DEPARTAMENTOS Y SUS LICORERAS RESTRINJAN LA PRODUCCIÓN, DISTRIBUICIÓN Y COMERCIALIZACIÓN DEL VICHE
El viche no puede estar a la merced de las licoreras y depender de las voluntades políticas de los departamentos.
Aunque se trata del último punto de los tres que traemos aquí como propuesta, a mediano y largo plazo este es el más importante. Aquí se define la estrategia. El futuro del viche como potencial marca-país y ejemplo exitoso de economía popular, como motor de desarrollo de una región discriminada, abandonada y marginada, depende de cómo el Estado defina la relación del viche con la legislación actual.
Actualmente la Ley 1816 de 2016 permite a las licoreras departamentales ponerle trabas a los licores artesanales en Colombia o en palabras del mundo jurídico, poner: “medidas especiales de protección para el aguardiente local. Esto incluye la facultad de detener la emisión de permisos para la entrada de bebidas provenientes de otras regiones y prohibir su venta en el territorio.” Y LO HACEN. Las licoreras Departamentales se pelean entre sí todo el tiempo. Y puede parecer algo bobo y anecdótico de nuestra realidad criolla, pero para los licores artesanales, como el viche, es una tragedia – es la muerte. La Ley 1816 de 2016 es la ley en vigor y permite que el monopolio rentístico de los departamentos.
El viche no puede caer en esta trampa. Los liderazgos políticos de las comunidades vicheras del Pacífico colombiano no son lo suficientemente fuertes como para ejercer un poder real sobre los departamentos y sus licoreras, lo que dejaría al viche a merced de las estructuras elitistas reinantes en el sector. Se debe imponer desde el Gobierno nacional la obligatoriedad de permitir la producción distribución y comercialización del viche libremente, cumpliendo los requisitos sanitarios y tributarios definidos, por supuesto, como se hace con los destilados importados, pero sin restricciones departamentales al antojo de cada uno.
La Corte Constitucional y la Ley 70 de 1993 lo tienen claro, pero no será una tarea fácil. Sin embargo, es la clave y donde creemos que usted vicepresidenta debería poner toda su energía. En la introducción de la Resolución 113 de 2024 están todas las herramientas para conseguirlo.
En el 2023 las licoreras departamentales vendieron casi 200 millones de botellas de licor, solo la Fábrica de Licores de Antioquía comercializó alrededor de 68 millones de botellas. Ese mismo año se importaron cerca de 100 millones de litros de bebidas alcohólicas.
¿Por qué le tienen tanto miedo al Viche?
¿Por qué le tienen tanto miedo a una bebida de pequeños productores y productoras de una región geográfica selvática, abandonada por el Estado?
El viche va a pasar todas las exigencias que le pongan. Es una bebida bien hecha, de calidad, orgánica, que le hace bien al mundo, pero ahora necesita de un esfuerzo político que usted puede ejercer.
¡Se necesita soltar el Viche, liberarlo de las trabas burocráticas, para que pueda crecer, aprender y ser una opción de progreso real para una población que lo reclama y merece hace siglos!
#VicheconINVIMAenlaCOP16
- Los Consejos Comunitarios son la autoridad étnica encargada de administrar los Territorios Colectivos de las comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras. Son una organización reconocida por autoridades públicas nacionales y por entidades internacionales. Fueron creados por la Ley 70 de 1993 y reglamentados por el Decreto 1745 de 1995. ↩︎